El Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES) participa en la organización de dieciséis sesiones del congreso. Los organizadores destacan la asistencia masiva de jóvenes

Un total de 1.600 científicos de 60 países diferentes y de los cinco continentes se han reunido entre el 1 y el 7 de septiembre en el XVII Congreso de la Unión Internacional de Ciencias Prehistóricas y Protohistóricas (UISPP), que se celebra a la Universidad de Burgos, organizado por la Fundación Atapuerca. El Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES) participa en la organización de dieciséis sesiones del congreso, y es miembro de la oficina científica de la Comisión Local Organizadora.

Eudald Carbonell, secretario general del XVII Congreso Mundial del UISPP y director del IPHES, ha manifestado: «Se han cumplido los objetivos con creces. Habíamos dicho que acabaríamos un ciclo para enseñar al mundo las inversiones públicas y privadas que se han impulsado desde la Fundación Atapuerca, a la vez que queríamos mostrar que aquí sabemos hacer las cosas bien, y lo hemos conseguido».

En la misma línea ha señalado: «A remolque de este objetivo hemos generado una nueva estrategia en el cambio académico, social y político y es que este congreso se ha abierto no sólo a los científicos de más renombre, sino que ha habido una participación masiva de jóvenes». También ha destacado el hecho de que se han dado a conocer cuestiones fundamentales por el desarrollo de la evolución humana. «Hemos tenido entre nosotros a los investigadores más importantes de los cinco continentes», ha dicho.

Otro eje a subrayar, según Carbonell: «Hemos convertido Burgos en la capital del mundo de la prehistoria y de la protohistoria, consiguiendo que la marca Burgos se asocie a evolución, y que la ciudadanía sea consciente de que esta localidad se ha transformado en una población de primer orden científico y cultural».

Por su parte, Luiz Oosterbeek, secretario general de la UISPP, ha declarado que el congreso de Burgos ha estado de una enorme importancia y supondrá la refundación de esta entidad: «Hemos conseguido que este congreso no haya sido sólo de las grandes figuras si no de las diversas comisiones que potencian la investigación».

Renovación generacional

«Desde que empezamos cambios en este sentido, el 2006 en Lisboa, hemos llegado a aquí con una investigación estructurada y con gran profesionalidad», ha añadido Oosterbeek. El propio arqueólogo ha incidido en la renovación generacional observada en Burgos remarcando que el 30 % de las comunicaciones presentadas han estado de la mano de estudiantes predoctorales y postdoctorales. Sólo el 40 % de los organizadores de las sesiones pasa de los 50 años, y sólo un 9 % de los 60. El 45 % de los organizadores tiene entre 40 y 50 años, y un 6 % no llega a los 40. «Nosotros veíamos los más jóvenes con la capacidad necesaria para coger el relevo de la investigación», ha puntualizado.

Robert Sala, secretario científico del UISPP y responsable del área de Docencia del IPHES, ha remarcado que cuando se tenía que preparar el congreso se formó un comité español y tanto las universidades como los centros de investigación de todo el Estado se han abocado. A la vez ha comentado que, con el congreso efectuado en Burgos, «España y la arqueología española han sido reforzadas. Es el congreso de Burgos, de Atapuerca, pero se ha sabido nuclear la arqueología del país».

Ahora queda pendiente la publicación y divulgación de los resultados. «El congreso ha tenido muchísima visibilidad social, pero acabará logrando totalmente su éxito cuando un porcentaje importante de las investigaciones que se han presentado sean publicadas en revistas científicas de gran difusión», ha asegurado Robert Sala.