Concluye la primera edición del máster interuniversitario de un sector emergente con alta demanda de profesionales

La primera edición del máster interuniversitario en tecnologías del hidrógeno se ha cerrado con la valoración positiva de los titulados. Destacan su potencial en el contexto de la descarbonización y en un sector en constante crecimiento. Es el caso de María Antònia Santacreu, una ingeniera con diez años de experiencia profesional en el sector del petróleo que, después de trasladarse al sector del hidrógeno, ha participado en la primera edición del máster para familiarizarse y conocer mejor las tecnologías y los profesionales que se dedican y se dedicarán a ello.

Para Santacreu, «el hidrógeno tiene y tendrá un papel relevante en los procesos industriales actuales y futuros del polígono petroquímico de Tarragona y en la movilidad en todo el territorio catalán y europeo. Por lo tanto, es necesario seguir formando profesionales en este ámbito».La estudiante afirma que animaría a otros estudiantes a cursarlo, ya que «se trata de una formación muy completa para profesionales por las prácticas, los puntos de control de todas las asignaturas, las visitas a empresas y el trabajo final». Señala que «necesita mucha dedicación» ya que «proporciona conocimientos extensos de las tecnologías de hidrógeno y aquellos aspectos relevantes de toda la cadena de valor».

Según Alberto Coronas, catedrático del Departamento de Ingeniería Mecánica y coordinador académico de la sede tarragonina del máster, «la colaboración entre las universidades, centros formativos e de investigación y empresas del territorio ha sido clave en el desarrollo de este programa», centrado en proporcionar a los estudiantes las competencias necesarias para desarrollar, gestionar y liderar las tecnologías del hidrógeno y sus aplicaciones en la industria, en línea con las estrategias europeas de descarbonización.

Jesús López, ingeniero técnico y alumno del máster, valora muy positivamente el enfoque interdisciplinario en torno al hidrógeno. «Conocía el hidrógeno como producto, pero no lo había tratado desde esta perspectiva industrial y ahora tengo unos conocimientos globales que puedo aplicar». También ha destacado que la modalidad virtual de la mayor parte del programa le ha facilitado la asistencia al curso.

Una de las principales ventajas de la URV es la proximidad con el entorno industrial, como explica Coronas: «Aquí tenemos uno de los mayores productores de hidrógeno y toda la industria que se concentra a su alrededor es singular y estratégica. Tenemos un gran complejo industrial cerca, varias empresas se han involucrado en este máster, tanto en las sesiones prácticas como en los trabajos de fin de máster».

Los perfiles del alumnado son muy diversos. Predominan los ingenieros pero también han participado operarios y técnicos de otros ámbitos. Coronas destaca que este tipo de máster es también una oportunidad para nuevos graduados que quieran especializarse en un sector emergente con gran potencial de crecimiento, ya que la industria necesita especialistas que conozcan los procesos y tecnologías en torno al hidrógeno y, por tanto, cuenta con una alta empleabilidad.

«Estoy convencido de que el hidrógeno formará parte de nuestras vidas, sí o sí. Aunque seguramente llegará mucho más tarde de lo que se espera. Es una apuesta necesaria y fundamental, a la cual la industria necesita adaptarse», afirma Jesús López. Y señala que los aprendizajes adquiridos durante el curso le han permitido desarrollar una opinión propia que le ayude a comprender la actualidad del sector. La Universitat Rovira i Virgili ofrece ya la tercera edición de este máster, que comenzará en octubre. De esta manera, demuestra el compromiso con la formación de profesionales capaces de liderar la transición hacia un futuro energético sostenible y reafirma el papel de Tarragona como un punto clave estratégico en la formación de expertos en el campo del hidrógeno.

Este máster está avalado por cinco universidades estatales: Mondragon Unibertsitatea, Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea, Universidad Politécnica de Cataluña, Universitat Rovira i Virgili y la Universidad de Zaragoza, junto con seis centros formativos e de investigación más: el Centro Integrado de Formación Profesional Somorrostro, el Instituto Comte de Rius de Tarragona, el Instituto Escuela del Trabajo de Barcelona, el Centro Público Integrado de Formación Profesional Pirámide, la Escuela de Organización Industrial y la Fundación del Hidrógeno de Aragón, y la colaboración de varias empresas.