Durante el curso 2014-15, casi 800 estudiantes han participado en una experiencia de Aprendizaje Servicio en la URV. Esto supone un aumento del 60% respecto del curso anterior. También crece el número de entidades del tercer sector con las que se trabaja, que ha llegado al centenar. El Aprendizaje Servicio es una propuesta educativa innovadora que combina procesos de aprendizaje y de servicio a la comunidad en un solo proyecto. La URV fue una de las primeras universidades del Estado a implementarla

Afrontar y resolver los problemas de las entidades sociales del territorio con el objetivo de mejorar el entorno: esta es la premisa del Programa d’Aprenentatge Servei (APS), una metodología docente que propone a los estudiantes de grado y de máster retos reales, en lugar de situaciones simuladas, sobre los que trabajar y desarrollar las prácticas de las asignaturas. De esta forma, el esfuerzo de los estudiantes va más allá del ejercicio de clase y tiene una aplicación directa en el entorno.

Este curso 2014-15 han sido 76 las asignaturas donde se ha realizado una experiencia de Aprendizaje Servicio, entre las que se incluyen los trabajos de fin de grado y de máster, así como las prácticas externas. Este número no ha parado de crecer desde que se puso en marcha la iniciativa, el curso 2011-12. El volumen de titulaciones ha aumentado hasta 33 y el de profesorado, hasta 93. Este año son ya 101 entidades sociales las que colaboran con la Universidad en experiencias de Aprendizaje Servicio.

En cuanto a los estudiantes que participan en la APS, el curso 2014-15 esta cifra alcanzó los 769, entre grado y máster. Esto supone un aumento del 60% respecto al curso anterior, y del triple respecto al curso 2012-13. Se calcula que, a lo largo de estos cuatro cursos de experiencias de Aprendizaje Servicio, los estudiantes han dedicado más de 166.000 horas acumuladas de prácticas de asignaturas a ayudar a las entidades del tercer sector (por las que, además, han recibido una calificación académica).

En estos cuatro años, destaca el punto de inflexión que supuso el curso 2013-14, cuando el número de profesorado y de entidades que se involucraron en el programa ascendió a más del doble, gracias en parte a actividades de visibilización como el I Mercado de Proyectos Sociales. Este curso se ha celebrado la segunda edición de este mercado. Sumando las dos ediciones, han participado más de una cincuentena de entidades sociales de Reus y Tarragona, y se han presentado más de cien proyectos de naturaleza social, cultural y ambiental.

Desde la URV se hace una valoración muy positiva de estos datos, que «demuestran el compromiso de la Universidad con el entorno, a la vez que con una formación innovadora y de calidad», explica Arantxa Capdevila, vicerrectora de Docencia, Estudiantes y Comunidad universitaria. «El objetivo de este año, además de consolidar las cifras, ha sido expandir el programa a todos los ámbitos del conocimiento. De esta manera hemos tenido estudiantes, profesores, asignaturas, titulaciones … de todos los ámbitos trabajando con la metodología APS», añade.

El Aprendizaje Servicio permite avanzar en uno de los grandes retos de la Universidad actual, como es la vinculación de sus tres misiones: la docencia, la investigación y la función social (tercera misión). Esta iniciativa cuenta con un marco institucional sólido en la URV, ya que se ha integrado en diferentes planes estratégicos y normativas académicas, así como en un plan de actuación específico aprobado por el Consejo de Gobierno. «Se trata de una iniciativa relativamente reciente pero con mucha fuerza en nuestra Universidad, que fue pionera en su implementación», explica la vicerrectora Arantxa Capdevila. En el año 2012 la URV fue una de las primeras universidades del Estado español en abordar un proceso de institucionalización de la APS, de acuerdo con referentes internacionales.