11/05/2023

La presencia familiar en las prácticas invasivas a adultos, un debate en auge

Un estudio del Departamento de Enfermería de la URV detecta controversia entre los profesionales, pero asienta las bases para avanzar en un procedimiento que el entorno del paciente valora

Autor: Wavebreakmedia_micro (Freepik)

La presencia de familiares en las prácticas invasivas en hospitales es un procedimiento más estudiado y admitido alrededor de los pacientes infantiles, pero apenas se va abriendo paso en los casos en que los afectados son adultos. Un estudio del Departamento de Enfermería de la Universitat Rovira i Virgili aborda esta cuestión, en la cual se mantiene bastante controversia entre profesionales, y asienta las bases porque sea considerado un procedimiento válido. Según el estudio, todavía hay reticencias entre el personal sanitario sobre si se puede permitir o no, a pesar de que los más jóvenes y los enfermeros y las enfermeras son más favorables a la presencia de familiares en las prácticas invasivas, que son las que implican la introducción en el cuerpo del paciente de algún dispositivo médico o la reanimación.   

A pesar de que es un tema poco estudiado en adultos, y que la investigación de la Universitat Rovira i Virgili es de las pocas que existen en el estado, sí que es una realidad que la persona acompañada se siente más confiada, no tiene tanta incertidumbre y, de alguna manera, sufre menos el dolor. También lo es, no obstante, que para los y las profesionales de la medicina es un aspecto en el cual de momento han recibido poca educación y formación y, por otro lado, los espacios hospitalarios están pocos pensados para la presencia familiar.   

“La controversia se mantiene en relación a los profesionales. En cambio, la mayoría de pacientes quieren ser acompañados por sus familiares, y la mayoría de los familiares quieren acompañar el paciente, a pesar de que no todos se ven capaces de acompañar, y depende mucho del procedimiento”, asegura Eva de Mingo, autora del estudio. De hecho, varias asociaciones tanto de enfermería como de medicina recomiendan la presencia de familiares en prácticas invasivas, como por ejemplo la ILCOR (International Liaison Committee on Resuscitation) y la ENE (Emergency Nurses Association), que ha hecho un protocolo para poder implementar esta práctica en la reanimación cardiopulmonar. “Todavía estamos en fase embrionaria, puesto que se difícil aceptar la presencia familiar en reanimación, y tenemos que empezar por los procedimientos menos agresivos”, afirma Eva de Mingo.   

Hay que tener en cuenta que además invasividad más riesgos, sobretodo porque las personas acompañantes podrían no entender los procedimientos que se llevan a cabo con sus familiares. En estos casos, para evitar malentendidos, sería necesaria la presencia del llamado facilitador familiar, que iría en todo momento explicando las prácticas que están realizando los profesionales.   

El estudio, publicado en la prestigiosa Biomed Central, ha sido desarrollado entre el personal del Consorcio Sanitario del Garraf. El siguiente paso es ampliarlo a personal de enfermería y médicos de todo Cataluña, además de profundizar en las investigaciones alrededor del estudiantado de enfermería, antes y después de la formación en reanimación, para examinar las tendencias y los puntos de vista, y diseñar así un protocolo con el cual se facilite la implementación de la presencia familiar. 

 

Print Friendly, PDF & Email

Comenta

*