El profesor emérito de Medicina de la UB repasa en la inauguración de curso de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud los avances de la medicina catalana del primer tercio del siglo XX y emplaza a los jóvenes a ser felices ejerciendo la profesión. Durante el acto se otorgaron los premios Sant Lluc

La lección inaugural del curso 2017-18 de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud, «La medicina catalana en el primer tercio del siglo XX», que realizó el profesor emérito de Medicina de la Universitat de Barcelona Miquel Bruguera, sirvió para repasar los hitos más importantes en este ámbito en Cataluña: la modificación de los patrones de asistencia sanitaria, la aparición de las especialidades médicas y quirúrgicas, la creación de las primeras mutuas y de los primeros centros de investigación biomédica, la consolidación de escuelas médicas y la introducción del catalán como lengua de comunicación científica.

Bruguera explicó a los estudiantes y profesorado de la Facultad que «la responsabilidad de los médicos que estamos en ejercicio es pasar el relevo a las nuevas generaciones inculcándoles el deseo de adquirir la mejor formación posible, que les permitirá ser útiles a la sociedad y ser felices ejerciendo la profesión de médico». Bruguera también destacó el papel de las facultades de Medicina en la recuperación del nivel de excelencia que esta disciplina alcanzó durante el primer tercio del siglo XX en Cataluña, antes de que se viera truncada por la Guerra Civil.

Fue durante aquel periodo de principios del siglo XX cuando ejerció el doctor Alexandre Frias en la ciudad de Reus, donde este 2017 se celebra el Año Frias y donde el médico consiguió reducir la tasa de mortalidad infantil, más que en cualquier otro lugar del Estado.

Durante la inauguración del curso se otorgaron los premios Sant Lluc a los trabajos de fin de grado y de fin de máster, que otorga la Fundació Privada Universitària Sant Joan de Reus a las enseñanzas de Nutrición Humana y Dietética y Medicina, y la Fundació STS a la enseñanza de Fisioterapia.

Aya Bakiou fue premiada por su trabajo de fin de grado de Nutrición Humana y Dietética «Evolució de la ingesta alimentària en pacients intervinguts de gastrectomia vertical laparoscòpica».

Anna Isabel Pellicer fue premiada por el trabajo de fin de grado de Medicina «Polymorphisms predisposing to Alzheimer’s disease also influence lipoprotein profile in patients with metabolic disturbances».

Mònica Aguiló y Joaquín Vicente Álvaro fueron premiados por el trabajo de fin de grado de Medicina «Gangli Sentinella en el Càncer de Mama».

El premio Dr. Rodrigo Miralles de investigación en Fisioterapia fue para el trabajo «Relación entre mochilas escolares y dolor musculoesquelético en niños y niñas de 8 a 10 años: estudio piloto observacional de casos y controles», de Tania López, Marina Caparó y Sílvia Giné.

A més a més, la Fundació STS va reconèixer el millor treball de fi de grau de Fisioteràpia a Laura Benevelli, Lorena Ibor i Andrea Riera per «Prevalencia de trastornos temporomandibulares en estudiantes universitarios y su relación con el estrés y la ansiedad». Van quedar finalistes Laura Menés i Sergio Pedraza pel treball «Relación Biomecánica entre la flexión de tronco y la apertura bucal. Estudio piloto».