15/01/2019
La tasa de abandono de primer curso en los estudios de grado de la URV es del 17,4%
Se hará un seguimiento más personalizado de los estudiantes que no siguen y el curso puente que ahora se hace en algunas ingenierías se extenderá a otras enseñanzas para reducir el abandono
Se hará un seguimiento más personalizado de los estudiantes que no siguen y el curso puente que ahora se hace en algunas ingenierías se extenderá a otras enseñanzas para reducir el abandono
Un total de 432 estudiantes abandonaron los estudios de grado en la URV durante su primer curso, el 2017-18. Esto hace que la tasa de abandono de los estudios de grado sea, en el primer año, del 17,43%, una cifra que ha aumentado progresivamente los últimos cursos (el curso 2015-16 la tasa fue del 15%, con 392 estudiantes que dejaron el grado). Para revertir la situación, se han implementado, o está en proceso de hacerse, una serie de medidas, como por ejemplo hacer un seguimiento más personalizado de los estudiantes que tienen más dificultades para seguir las asignaturas, ofrecer información más personalizada y específica durante las jornadas de puertas abiertas, e instaurar un curso puente antes de iniciar el curso propiamente que permita a los estudiantes adquirir el nivel de conocimientos adecuado para empezar el grado.
Si se compara la situación con el Sistema Universitario de Cataluña Público, la URV se sitúa por debajo de la media de las universidades catalanas en cuanto a la tasa de abandono de grado. Así, según los datos del curso 2015-16, las últimas disponibles sobre todo el sistema, la media de abandono del primer curso en el sistema público catalán era del 17% mientras que en la URV era del 15,6%.
Los datos de aquel curso permiten observar que el 12% de los estudiantes que abandonaron (108 de los 898 en todos los cursos de grado) volvió a matricularse en la URV; el 18% lo hizo en otras universidades catalanas y el 8% en universidades de fuera de Cataluña. Sin embargo, el 62% de los estudiantes que dejan los estudios de la URV tampoco los continúan en otros centros universitarios.
La proporción más elevada de abandonos pertenece al ámbito de las Ciencias Sociales y Jurídicas (42%), seguidos de la Ingeniería y Arquitectura (23%). En cambio, los estudios de la rama de Ciencias (6,5%) son los que tienen un menor peso en el total de abandonos. En cambio, si se considera la tasa de abandono más grande, esta corresponde a la rama de Artes y Humanidades (16,7%), seguida también por la de la Ingeniería y Arquitectura (12,7%). La más baja es por estudios de Salud (5,4%).
Las causas del abandono
El estudio que ha hecho la propia Universidad detalla que el abandono en el primer curso es inferior cuando los estudiantes tienen un buen expediente previo, puesto que el 40,7% de los que dejan los estudios habían accedido en la Universidad con una nota de las Pruebas de Acceso a la Universidad igual o inferior al 6. También incide en el abandono el hecho de no tener beca (son el 22,4% de los que abandonan) y si el estudiante tiene que conciliar los estudios con un trabajo (el 43,4% de los que dejan los estudios en primero).
Para obtener la opinión de los propios estudiantes, en 2017 se hizo una encuesta a una muestra de los que habían abandonado el curso universitario. Los motivos de la deserción que adujeron son varios, a pesar de que en una mayor proporción se trata de un desajuste en las expectativas. Así, el 23% alegaba un desinterés general en los estudios escogidos, el 11% indicaba motivos de conciliación laboral, el 9,4%, problemas de transporte, y el 9,2% la dificultad de las asignaturas.
Actuaciones para revertir la situación
Con el objetivo que los estudiantes continúen los estudios iniciados, la URV ha puesto en marcha varias actuaciones. Por un lado, se quiere hacer llegar a los futuros estudiantes la información más adecuada a sus intereses. Por eso, se incidirá tanto en la colaboración con los centros de secundaria como en la mejora de las jornadas de puertas abiertas, que darán una información más personalizada y específica de cada grado.
Por otro lado, el curso puente que ya funciona en algunas ingenierías para facilitar los conocimientos mínimos en física, química y matemáticas a los estudiantes de nuevo acceso que lo necesitan, se puede extender a otros estudios. Además, para que se pueda hacer este curso inicial y para que los estudiantes procedentes de reasignación no empiecen el curso mucho más tarde, el calendario académico del curso 2019-20 empezará a finales de septiembre. Una vez comenzado el curso, se hará un seguimiento de los estudiantes que no siguen en algunas asignaturas, y los centros analizarán el número de estudiantes que no siguen, así como sus causas.
Por último, el equipo de gobierno ha solicitado a los ayuntamientos y a la Generalitat una mayor y mejor conexión de los campus con transporte público, la implantación de una zona única y una reducción de las tarifas de transporte para los estudiantes.